To be or not to be

>> 13 ene 2010

El otro día hablando con alguien saltó, una vez más, el dichoso tema de la homosexualidad como elección libre.  Me pasa seguido en charlas con gente heterosexual(*), pero, increíblemente, también me encontré con este razonamiento dentro de la propia comunidad.
Si digo 'increíblemente' es porque no puedo entender (ya dije por ahí que tengo mis limitaciones) que se razone de esta manera tan... bueno... me ahorro el adjetivo.  ¿Cómo podría ser una elección algo que te sobreviene de forma involuntaria?  Yo no elijo sentir atracción por una mujer, simplemente me pasa.
Digo, no es como elegir mi comida preferida (pizza fría con mate a la mañana... y así me queda el hígado, por suerte existen las bondades del omeprazol).  Si de elección hablamos, en todo caso se refiere a vivir una vida consecuente con ese impulso, pero no por el impulso mismo.  Ser abiertamente homosexual o vivir enclosetado/a puede ser una elección (a veces difícil), pero no así -al menos para mí- ser o no ser.
Ustedes ¿qué opinan?



(*) Sobre todo con tipos que me quieren levantar y cuyo mejor argumento suele ser "vos sos lesbiana porque no estuviste conmigo" (?) -todo esto con cara de winner-, como si ser lesbiana fuera la consecuencia de haber tenido 'malas' experiencias sexuales con hombres o no haberlas tenido en lo absoluto.

8 comentarios:

Caro 13 de enero de 2010, 21:08  

Qué buena pregunta. Seguro que no es una elección sentirse atraída por una mujer. O tal vez si lo sea desde el momento que ud decide que va a intentar estar con aquella mujer que desea.
Entonces, la elección es estar con una mujer. Tener la libertad (interna) para estarlo... Y no sentirnos atraídas por ellas.
Se entendió? Sino más tarde lo reformulo.
Besos!

Gabriela Aguirre 13 de enero de 2010, 23:05  

Caro: Ay, reformule Caro porque, o bien yo tengo dos neuronas y media menos, o no entiendo un pomo lo que dice.
Besos!

Caro 14 de enero de 2010, 0:10  

Ya aclaré que estoy quemada.
Es simple. La elección, como ud bien dijo, no es sentirse atraída por una mujer. Eso le pasa o no. La elección es decidir hacernos cargo de eso que nos pasa e intentar compartir la vida con una de ellas.
Ahora si? Lealo de nuevo que no era tan complicado.
Besos!

Gabriela Aguirre 14 de enero de 2010, 7:46  

Caro: Ahora sí. ¡Claro! Eso es lo que digo, que no hay elección en el deseo sino en el hacerse cargo de ese deseo.
Besos y abrazos.

Anónimo,  15 de enero de 2010, 0:08  

Interesante esta Gabriela! Creo que se trata finalmente de una elección, empujada por un impulso o inclinación o como se quiera llamar...

Gabriela Aguirre 15 de enero de 2010, 8:09  

Anónimo: No, no creo que intervenga la elección aquí, porque eso significaría que controlo mi deseo y, yo no sé usted, pero lo que es yo jamás lo he logrado.
Gracias por comentar y bienvenido/a.

Anónimo,  15 de enero de 2010, 17:33  

Gabriela, el impulso sobreviene de forma involuntaria, es como el hambre, uno no elige tener hambre, lo que puede elegir es que comer (cuando se puede). El deseo es el anhelo de saciar un gusto, pero en ese camino intervienela razón, el ser humano se contiene y elige, mas allá de la condición sexual.
De todas manera es solo mi opinión, está bueno tu punto de vista, mi nombre es Julio.Gracias por contestar el escrito de ayer.

Gabriela Aguirre 15 de enero de 2010, 23:18  

Julio: El hambre no es un impulso sino una necesidad fisiológica así que no creo que sea el mejor ejemplo, pero entiendo tu punto.
Mi pregunta es, para hacerlo más 'interactivo' si se quiere, ¿esto quiere decir que vos deseas tanto a mujeres como a hombres, pero 'elegís' racionalmente tener sexo sólo con uno de ellos -o mujeres u hombres-? Si es con mujeres tu 'elección'... ¿contenés tu deseo por los hombres? (y viceversa, claro)
No estoy negando la bisexualidad, por supuesto, simplemente digo que para mi no hay elección posible. Me gustan las mujeres, tanto si 'elijo' estar con una como si no... me gustan igual.
Para usar tu mismo ejemplo diría: me gusta la pizza, puedo vivir sin comer pizza, puedo pasarme toda la vida comiendo hamburguesas..., pero eso no hace que deje de gustarme la pizza ¿se entiende?
El intercambio de opiniones siempre es bueno, Julio, gracias por pasar.

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