Juro solemnemente...

El giratiempo de Harry Potter

... bajo todas las biblias, el corán, la torá, el libro gordo de petete, el recetario de doña petrona y el maría molinere que el 2011 no me encuentra tan narda así tenga que morir en el intento, que retomo cocina de una vez por todas [nobleza obliga: esto lo vengo prometiendo hace como dos años], que voy a estar más tiempo con lily y emma, que voy a ser menos implacable con los errores ajenos y más introspectiva con los propios, que voy a dejar de esperar lo imposible (gente, la frase esa que dice que lo imposible sólo tarda más es de un optimismo pelotudo tan, pero tan grande...), que no me voy a frustrar porque un otro no es como a mi me gustaría que fuera, que voy a pasar más tiempo con mi sobrino, que voy a hacer más cosas que me gustan, que voy a armar las peceras que tengo descuidadas, que llevo a la práctica al menos el 50% de las ideas comerciales me vaya como me vaya, que organizo mi biblioteca, que me compro la moto que quiero sin que me importe un comino lo que digan los demás (ja, como si me costara tanto...).

Y seguro después se me ocurren otras, pero por ahora ésta es mi lista de promesas.

Y además, juro solemnemente que mis intenciones no son buenas.