Uno
>> 11 may 2010
Un día malo.
Un día como cualquier otro, sólo que malo, un poco triste quizás, un poco confuso también. O mucho.
Y un día, comparado con el resto de mi vida, no parece tanto.
Un día es apenas 24 horas.
Un día no es nada.
Mentiras.
Un día puede cambiarte la vida.
La vida es eso nomás: un día.
O dos.
O cinco.
Cinco días pueden hacer de tu vida un infierno o un paraíso.
Un día puede acercarte todo lo que buscaste.
Una hora puede sacártelo.
La diferencia está en poder ver que cada hora cuenta.