La palabra con A

>> 23 mar 2013

- Tengo una definición un tanto extraña de "amante". Para mí una amante jamás es sólo sexo. Nunca. Es decir, una amante es alguien con quien tengo sexo, claro. Y salgo a cenar y al cine y voy a su casa y viene a la mía y nos vamos de vacaciones si da, incluso tengo una relación de exclusividad con mi amante -le digo.
- Eso se llama novia, Gabi -dice Maru.
- No.
- ¿Por qué, porque no la amás?
- Puedo amar a una amante, claro que sí. Pero lo que diferencia a una novia de una amante son los proyectos. En cuanto tengo un proyecto conjunto deja de ser mi amante para convertirse en mi novia. Es la única diferencia y es la única en serio.

Y diciéndoselo en un punto me lo digo. Y cuando me lo digo entiendo por qué todo el mundo me mira con cara rara cuando digo "amante". Se ve que no muchos piensan como yo.

9 comentarios:

Gerchu,  23 de marzo de 2013, 19:20  

Gaby:
Coincido con su amiga. Eso de su definición se llama novio o novia.
Ni en estado de profunda borrachera - ¿vio qué políticamente correcto estuve? - invito a un amante al cine, o me apersono en su casa, o salgo a cenar. y menísimos aún de vacaciones!

Porque, mal que le pese, esas cosas implican proyectos en común. Por ende, ese especimen humano se convierte, ipso facto, en una novia.
Y no valen aclaraciones posteriores, porque su post es una transcripción de charla. todo agregado sería fantasía.
Y digo esto porque usted no aclaró que estuviese hablando de construir una casa. O una presa hidroeléctrica. Mucho menos sus respectivos funerales de muuuuuuuy viejitas. Es decir, tesoro mío: no planteó plazos, por lo que una casa y una salida al cine son proyectos.
He dicho.

Anónimo,  23 de marzo de 2013, 19:30  

Para mi es todo lo contrario. Y cuando mi amante tuvo eso de proyectos en común, dejo de ser mi amante. Para convertirse en nd. Y amaba a mi amante. Pero yo mis proyectos los realizo con mi marido y familia... ja. No se quien esta errada... Abrezo! Ol.

Anónimo,  23 de marzo de 2013, 22:22  

No, nadie piensa como vos. ¡Jaja! Y esa chica tiene razón, eso es una novia.

Cuando arrancan los proyectos en común, deja de ser una novia para pasar a ser una pareja.
Ssabelo.

Besos!

Gabriela Aguirre 23 de marzo de 2013, 23:22  

Gerchu: Nanana...Mentira.
Novio o novia es otra cosa.
Un amante para sólo tener sexo es un embole al cubo, Ger.
Y el embole tiende a infinito, mirá lo que te digo.
Si no puedo tener media charla, reirme, salir... ¿para qué quiero una amante? Una amante que sea compañera y amiga, sin compromisos, sin que vaya a la fiesta de los primos, sin conocer a la familia, sin que tengamos amigos en común. Eso.
La novia o el novio es otra cosa. La novia o el novio es el que, eventualmente, va a convivir con vos. De ese proyecto hablo.
He dicho también. Besos.


Ol: Bueno, porque usted cree que un amante es alguien con quien "le mete los cuernos" a su marido y no es sólo eso.
Busque en la wiki, va a ver que tengo razon.
Saludos.


Vero: No. Todos ustedes están equivocados.
Besos!

Maru 24 de marzo de 2013, 2:44  

Yo tengo razón entonces, es una novia no es una amante.

Besitos

Gabriela Aguirre 24 de marzo de 2013, 2:47  

Maru: No, no tenés razón, lo que pasa es que estamos hablando de mi propia definición. Y yo defino así como te dije.
El resto del mundo, evidentemente, opina distinto.
Besos. Dos.

Gerchu,  25 de marzo de 2013, 8:43  

Gaby:

Sí, una linda parte del resto del mundo pensamos distinto, por eso la queremos.
Y créame, na de na aburrido el purito sexo. Claro que charlamos, de muchísimas cosas.
En mi asociación gremial - no tengo constancias de la suya - es muy común que sea muy fácil conseguir amantes del tipo de los que prefiero: comprometidos - noconmigo, obvio! - y con ratos para pasarlo de puta madre, como dirían mis amigotes peninsulares.
Y charlamos de los respectivos laburos, de los planes y proyectos - los de él y los míos, nunca hay proyectos entrambos - y de tantísimas otras cosas que forman parte de su y mi vida, por fortuna separadas.
No quiero que mi amante me quiera. Quiero que me desee, quiero desearlo. y no me permito enamorarme, porque sería cambiar algo lindo en una catástrofe en progreso.
Para mí, claro. Como dice su y mi querido Sabina: "me han traído hasta aquí tus caderas, no tu corazón".
La diferencia es que jamás apareceremos susurrando al oído que nos moríamos por verle otra vez.
Pero eso - creo - nos es más propio. Tendemos a desatender amores los tipos, de la orientación que encuentre, tendemos siempre a lo mismo.
Pero no lamentamos. La mayoría no lo hacemos.

fla,  25 de marzo de 2013, 22:27  

yo creo q es así como lo decís... Pero como resulta herido mi orgullo cuando entiendo q la persona q se divierte conmigo etc etc sólo busca ser mi amante!! Todos queremos más hasta q ya no queremos más nada.

Gabriela Aguirre 27 de marzo de 2013, 12:49  

Gerchu: Claro, yo entiendo lo que decís, pero yo me aburro como una ostra si es sólo sexo.
Si no hay una buena conversación post sexo (que son las mejores), paso. Si no puedo tomarme un mate, paso. Si no puedo salir a pasear por ahí, paso.
Porque la cosa es que yo la quiero a mi hipotética amante, me cae bien, es inteligente, simpática, brillante a veces, no tenemos proyectos comunes, pero es lo de menos. Y enamorarse siempre es un riesgo, pero yo creo que si no te enamorás de una, ya no te enamorás más. Me he ido de casa de amantes preguntándome por qué soto no me enamoraba de ella que era un bombón, pero no sucedía y bueno, si no es no es, eso no implica que no la pase genial.
El remanido amor complica todo, pero ¡qué necesario es!
Besos.


Flavita: Si las cosas están claras desde el vamos no debería haber problemas de orgullo. Puede pasar que una se engache, y lo tendrá que decir nomás, pero, como dije antes, a mí me parece que si no te enganchás de una, no te enganchás más.
Besos.

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