A veces una pipa es solamente una pipa

>> 1 abr 2013

Que del mundo virtual el 99.9 por ciento de la gente está loca es un hecho. Un hecho tan evidente que ni siquiera nos vamos a poner a discutir sobre él.

No digo con esto que yo, que pertenezco a ese mundo por default, no lo esté también, claramente lo estoy; sin embargo, cada día que pasa me voy dando cuenta de que mi locura será locura, pero entra dentro de los cánones de lo que yo llamo "salud". Sí, así de contradictorio.
Todos sabemos que cuando conocés a alguien virtualmente es factible que todo lo que diga sea mentira. Sobre todo porque es algo muy tentador mentir y armarse una vida virtual cuando no se está conforme con la propia. Digo, si el otro no puede de niguna manera confirmar lo que estás diciendo, ¿por qué no decir que vivimos en Australia, tenemos 30 años, somos el doble de Angelina, hablamos cinco idiomas y nuestro apellido es McDonald, sí, el de la famosa cadena, ese mismo, qué loco, no? Podemos decir todo eso y más. Nos podemos encargar de, como para hacer más verídica nuestra historia, rejuntar un par de fotos de esas que la gente sube indiscriminadamente a la red que tengan las características que querramos, una en la playa, otra con la "familia" y una par de buenas primeras tomas. O nos armamos un blog o una página en donde vamos contando las cosas como nos gustarían que fueran haciéndolas pasar por reales.
Por ejemplo, para dejar clara la idea: Gabriela Aguirre bien podría llamarse Juan Pablo. Juan Pablo podría haber estado terriblemente aburrido un día y haberse armado un blog hace cuatro años contando todas las pavadas que ustedes leyeron acá. Juan Pablo también podría haber sacado una cuenta de facebook a nombre de Gabriela y llenarla de fotos. De vez en cuando, Juan Pablo chatea con alguna mujer de las que comentan por el blog y hablan de cosas que sólo ellos saben. No es difícil hacer eso. Exige un nivel de locura importante y un poco de tiempo al pedo, pero no es difícil. Lo que pasa es que Juan Pablo está aburrido y, oh, le atraen las lesbianas y, ¿de qué manera podría estar más cerca de una que haciéndose pasar por una? Porque Juan Pablo estará loco, pero además es inteligente. Claro, tiene sus contras, Juan Pablo jamás podrá encontrarse con nadie de manera real porque ahí mismo se termina su jueguito, pero, bueno, mientras tanto tiene una vida virtual y parece que eso lo conforma.
La gente que lee este blog y que no me conoce puede, perfectamente, pensar que soy Juan Pablo y eso, creánme, es lo más sano que pueden hacer. La gente que me conoce, con la que me encontré, que tiene mi número de teléfono y me llama para saber si se me pasó la fiebre, esa y sólo esa sabe que no lo soy, pero nadie más, el resto está obligado a dudar.
No entiendo a la gente como Juan Pablo. O sea, entiendo que alguien no esté conforme con su vida porque, de hecho, yo tampoco lo estoy, lo que no entiendo es la manía de armarse otra virtual como si esa reemplazara a la real que no nos gusta. ¿No es más fácil jugar a los sims? Es más fácil, no me jodan. Y, en el medio, no le mentís a nadie. Es más, si tenés muchas ganas, jugás a los sims online e interactuás con otra gente que, por ahí, hace lo mismo.
Hey, yo jugué a los sims. Debería haber todo un estudio antropológico de los sims. Una literalmente deja de vivir para que tu sim coma, vaya al baño, trabaje, estudie y críe a sus hijos. Mi sim se llamaba como yo y tenía el hijo que quería tener que se llamaba Santino, nombre que, con mi apellido, ni siquiera se me hubiera ocurrido ponerle a un hijo real porque quedaba para el orto. A veces, Magui entraba a jugar y agarraba a mi novia (en el caso de que no fuera ella misma) la metía a nadar a la piscina y después le sacaba la escalerita, o la metía en una habitación y luego hacía desaparecer la puerta. Mala Magui, sí. Igual, otras veces, yo entraba a jugar y hacía que mi sim enamorara a su novia (si no era yo misma, claro). Vengativa Gabi, sí.
Pero mi sim no era yo ni su vida era mi vida.
Por h o por b tampoco es mi vida. Mi vida está en otro lado, afuera de acá. Mi vida tiene que ver con mi familia, mis amigos, mis carreras, mi trabajo. Es decir, con afectos y responsabilidades, con derechos que gané y otros que voy ganando de a poco, también con los que perdí por zoquete y que intento recuperar aunque duela.
En por h o por b hablo de mí. Y si bien todo lo que escribo podría ser mentira, lo cierto es que no lo es. Hoy es uno de esos días en que quisiera haber mentido desde el principio porque siento que diciendo la verdad me expongo a que cualquier enfermito/a pueda hablar de mí como si me conociera (de mi o conmigo, está claro). También es cierto que una de las razones por las que mantengo el blog abierto es que me permite conocer gente (y porque me gusta escribir, a qué negarlo). Gente loca y gente cuerda. Me quedo con los últimos y a los primeros los descarto, pero no siempre es tan fácil darse cuenta.
Desde este lugar conocí a mucha gente, gente que mantengo, que llamo amiga, que no hubiera podido conocer de no haber existido este espacio. Y mi vínculo con esa gente dejó de ser virtual hace muchísimo. Reí y lloré con ellos, me tomé miles de cafés y millones de mates, mandé cientos de mensajes de texto y recibí otros tanto, pasé horas interminables hablando de las cosas más inverosímiles, conocí hijos, amigos y mascotas de esa gente, fui a cumpleaños y vinieron a los míos, nos juntamos en la marcha, nos sacamos fotos, compartimos experiencias y filosofía de la barata y de la cara, gritamos goles y puteamos al papa juntos, con algunos, incluso, y por esta manía de la endogamia torteril de la que todos reniegan (pero muy pocos cumplen), compartimos adn; y un número más pequeño aún de gente que conocí por acá, me acompañó durante un breve lapso de tiempo y del camino . La virtualidad fue sólo una herramienta que nos permitió conocernos, luego la descartamos.
Desde este lugar también conocí a otro tipo de gente, gente que me acosó por email, que envió comentarios poco menos que ofensivos (y poco más también), que (la más extrema) llegó a averiguar el número de teléfono de mi trabajo e instalarse en el msn de una amiga (y ahí casi hago una denuncia, créanme); gente que se hizo pasar por otra, que mintió, que creyó que, por el sólo hecho de leerme, me conocía más que yo misma y, por lo tanto, se sintió con el derecho de juzgar mi pasado y presente.
Como los lindos fueron más, siempre digo que el balance da positivo. Pero no me olvido de los otros. Por esos otros es que, justamente, me volví un poquito paranoica (y mucho también) y, entonces, no agrego a nadie a mi facebook que no se presente adecuadamente (y a la primera en que se desubica, los saco), tengo un programita dentro del blog que me dice las ip de los comentaristas (el país de origen, el sistema operativo, la definición de su pantalla, el navegador que usó, la cantida de tiempo que pasó online y hasta las acciones efectuadas) y, en general, no agrego a nadie a mi msn o a mi google talk. Es decir, los lindos hacen que sonría y los otros hacen que revise absolutamente cualquier comentario anónimo fuera de tono o que compare ips de emails para saber desde qué lugar geográfico fue enviado. ¿Mucho trabajo, no? Bueno, sí, pero como no la he pasado bien, mejor prevenir, dicen por ahí.
Ustedes se preguntarán por qué digo todo esto. Porque estoy harta de las mentiras, porque no entiendo las razones que te llevan a una doble vida ni me interesa entender, pero sí quiero que no me jodan, que si tienen ganas de jugar un ratito, se armen un sim y si quieren les paso un par de trucos para tener más simoleones.
La vida no es virtual. La vida son los mates que te tomás con tu hermana que viene a despertarte a las nueve porque está aburrida, es tu sobrino que viene corriendo a mostrarte una buena nota, son los perros ladrando a las cuatro de la mañana y una queriéndolos ahorcar, es perderse una clase de álgebra porque hace tanto que no nos vemos y charlar hasta las dos mil quinientas. También es extrañar lo que perdiste, cocinar cuando no tenés ganas, putear, limpiar tu casa cuando se parece a Kosovo, ordenar la biblioteca, leer papeles que dejaste en la pila de "para revisar" y que no te animás a tirar, barrer el patio veinte veces por día porque un vientito de morondanga volvió a llenártelo de hojas, tratar de pasar un día sin el broncodilatador y empezar a pensar en dejar de fumar, pero nunca decidirse. Es decir, es otra cosa, no esto.
Escribo porque me gusta escribir y porque me gusta que otros lean lo que escribo. Supongo que eso me convierte en egocéntrica, pero para saberlo no hacía falta tener un blog, ya lo sabía de antes. Y ustedes también. Escribo de mí, de lo que me pasa, de lo que siento, de la música que escucho, de lo que me conmueve, de lo que me enoja, del amor cuando lo tengo, de los sueños. Escribo para decir "te extraño" y para decir "te amo", también para decir "chau". Escribo porque no sé vivir de otra manera sino escribiendo y leyendo, porque es uno de mis grandes placeres, porque me creo que escribo bien aunque tenga errores gramaticales y ortográficos, porque creo que a alguien le interesa lo que digo, porque a veces se dan diálogos interesantes con gente que no conozco sino a través de lo que escribo y de lo que ellos leen. Y, sin embargo, si bien el blog funciona bastante como catársis, cuando tuve cantidades industriales de veneno para destilar no lo hice, cuando la gente que tenía cerca traicionó mi confianza no salí a gritar a los cuatro vientos poniendo nombres y links que redireccionen, cuando me mintieron dejándome en el perfecto lugar de pelotuda al cubo hice silencio acá, sobre todo por mi firme convicción de no rebajarme al lugar del otro. Di segundas y terceras oportunidades ante los errores y si las di fue porque cuando yo me equivoqué también me las dieron y porque creo que todos nos podemos equivocar, que todos somos falibles, que a veces hacemos lo que podemos. Pero ojo, yo no soy todo lo que digo acá, soy bastante más. Creer que sólo soy lo que escribo es tener una lectura sesgada.
Que en el mundo virtual el 99.9 por ciento de la gente está loca, es un hecho. Yo no lo estoy menos, pero sí distinto. Y soy bastante caida del catre para algunas cosas y, ¿adivinen?, me gusto así como soy, pero de ninguna manera voy a permitir que me sigan tomando de idiota porque la primera vez pudo haber sido un error, la segunda es culpa mía sin dudas.
Lo que quiero decir es que me perdonen, pero a partir de ahora y a raíz de cierto acontecimiento que no voy a contar en el blog, la Gabriela crédula se murió, se fue, no está más, los otros pueden seguir inventándose una vida virtual todo el tiempo que quieran, yo, como Tomás, digo: ver para creer.
Y hasta ahí.
Alguien de mi familia, de esa que no me habla desde hace años, decía "piensa mal y acertarás dos veces". Muy a mi pesar voy a tener que darle la razón. Escribí este post hace más de una semana y esperé para publicarlo porque esperaba una confirmación que me negué a creer hasta el último minuto a pesar de tener alarmas sonándome por todos los rincones.
Lo que diferencia, entre otras muchísimas cosas, la verdad de la mentira, es que la verdad no tiene enredos, es simple y llana, por eso la mentira es tan seductora, porque tiene aristas, recovecos, situaciones problemáticas, soluciones mágicas. La verdad suele ser "y pasó esto", mientras que la mentira necesita de explicaciones que la sostengan, y esas explicaciones a su vez necesita de otras y así. Hay que tener una memoria enorme para mentir. Cuando las alarmas suenan lo mejor es prestar atención. Incluso cuando no sabemos por qué.
La mayoría de las veces, una pipa es solamente una pipa.

22 comentarios:

Anónimo,  1 de abril de 2013, 19:19  

Largo, pero excelente post.

Igual Bas, no es solamente el mundo virtual el que está lleno de soret@s; los hay por todas partes, en el mundo real también. La clave está en reconocerlos rápidamente, para "eliminarlos" de tu vida... y creo que es en ese punto donde solés fallar, nena. A vos suele tomarte un ratito más que largo darte cuenta del soret@ que tenés al lado :P

Si hay algún idiota por ahí jodiéndote, block block block. Sino, un sicario también funciona jajajajajaja

Besos satrapita!
Manatee

Loohan 1 de abril de 2013, 19:34  

Guau, me llama la atención que alguien esté tan al pedo como para crear toda una vida entera. Será que tuve suerte y, hasta ahora, no me vengo cruzando con ése tipo de gente.
Mire, señorita, sé que a mí me conoce sólo por la virtualidad pero le garantizo que soy yo.(?)
Con estas cosas hay que ponerse serio. A mí, si bien no me han acosado (todavía), sí ha habido gente que me ha venido a atacar a mi blog por mis propias opiniones (cosa inentendible).
Le deseo mejor suerte, honestamente. Y tenga cuidado pero no se deje amargar, no deje que esa gente le arruine la posibilidad de hacer nuevos amigos y conocer gente nueva. =)

¡Un beso!

Gabriela Aguirre 1 de abril de 2013, 19:39  

Mana: Ay, gracias.
No, tenés razón, no es sólo el mundo virtual, el real también está lleno, pero en el real me topé con bastantes menos, o por ahí el filtro es mayor, andá a saber.
Besos, satrapita vos!


Loohan: Ah, no sé Loohan, todo bien con usted, pero yo hasta que no la vea...
(jaja)
Besos.

Gerchu,  1 de abril de 2013, 22:06  

Estimado Juan Pablo:

Como hace mucho que no logro encontrarme con mi amiga - la real - Gabriela, y como parece usted tener un par de datos de ella, mucho estimaré sus buenos oficios a fin de hacerle conocer que Marianela - ella me conoce como Gerchu - le anda queriendo ver.
Aclárele que mi género real no implica el cambio de la calidad de tocamientos, que seguirán siendo angelicales.

Ger.

PD: Preferí este comment, porque si hacía el que quería, iba a putear en persa antiguo, en copto, en arameo, en idish, en swahili y en cordobés básico - no soy de allí pero aprendí un par de expresiones ad hoc - al HDRMP que te ha jodido la existencia.
Y tal vez Manatee tenga razón, y también un toque Looan, pero en esto vos tenés que hacer aquello que te haga sentir mejor con vos. Como en tantas cosas, los de afuera - de tu piel digo - somos de palo.
Eso sí, algunos seremos de fierro también. Por si hay que desnucar al / a la gusanesca existencia del gusanesco ser.

Besos,muchos, y con el abrazote que vengo juntando! XD

Anónimo,  2 de abril de 2013, 1:42  

Yo habia estado pensando en inventrarme un personaje como para comentar pero como soy poco creativa y odio las mentiras me parecio titanica la idea. Mucho trabajo es mentir,,,
Ahora que se que sabe las ips me da mas verguenza que antes,,,
Tu blog es muy copado...por eso entro siempre,
un beso grande

Gabriela Aguirre 2 de abril de 2013, 4:59  

Gerchu: Estimado Gerchu, aquí Juan Pablo, digale a Marianela que difícilmente me vea, a lo sumo me toca. Angelicalmente, está claro.
Avísele también que como Gabriela es medio pelotudita no anotó su fecha de llegada, así que le pide que le recuerde cuándo soto es.
En cuanto al post data. Yo hago lo que me hace sentir mejor, pero a veces la gente se encarga de hacerme cambiar de opinión.
Besos y abrazos angelicales.


Anónimo: Mucho trabajo, sí, la verdad que sí.
Ah, pero no le de vergüenza, haga como alguno/as e instale un redireecionador de ips y listo. Ahora sí, sepa que me va a resultar muy sospechoso si comenta desde Israel.
Gracias por pasar.
Besos.

Anónimo,  2 de abril de 2013, 9:27  

Un redireccionador de Ips? jaaaa!
No puedo ni instalar la impresora!

Gabriela Aguirre 2 de abril de 2013, 13:00  

Anónimo: Jajaja! Ok, ok.
Sin redireccionador entonces.
Besos!

Anónimo,  2 de abril de 2013, 18:04  

Yo también entro siempre, comento a veces, leo todo. Firmo como anónimo, pero de vaga nomás. Soy la madre de tu gato...
¿Qué pasó?
Espero que nada malo Gaby.
Te mando un beso grande,

Pao

Gabriela Aguirre 2 de abril de 2013, 22:19  

Pao: Hola madre de mi gato.
Mandale besos a mi gato (y abrazos y mimos).
Nos vamos a poner positivas y vamos a decir que "todo sirve", incluso lo malo.
Besos.

Gerchu,  3 de abril de 2013, 13:49  

Estimado Juan Gaby:

Aquí Gerchuela, con un toque de crisis ezquizo-técnica ... jjoajaojij.a.aj.ja.jdajoajfojalskdaoj ..

Errrggg .... ajjj ... coooof cooofff cofff ...

AAAh! Sí, hola Gaby!

Okay, le aviso a mi amiga - invisible, claro - de sus términos.

Hame avisado ella, a su vez, que debo recordarle la fecha de mi próximo viaje, que se ha visto retrasado debido a los retrasados del Ministerio de Educación, que nos descontaron a mansalva, hayas faltado o no por el motivo que fuere.
Ergo, viajaré recién para la tercera semana de mayo - 20 al 24 de mayo - si Baal, AStarot, Osiris y la secretaria de la clínica me hacen el favor de confirmar turnos.

De todos modos, yo le haré saber más cerquita y con mayor detalle los demás datos.

Besos!

Ger.

Gabriela Aguirre 3 de abril de 2013, 15:19  

Gerchu: Ah, pero me cago en Perón.
Bueno, cuando sea más cerca avisame, pedazo de puto.
Besos!

Gerchu,  4 de abril de 2013, 22:05  

Queja formal:

Gaby:

Cóóóómooooo catzo hago para recibir las actualizaciones d los comentarios, sin ´pasar catorce horas rebobinando posts?

Es que por ahí me pierdo comentarios, y otras veces ni tiempo tengo para el RW.

Si no hay cachete, bue, a seguir yugando!

Besos y avisaréle oportunamente, por todos los medios a mi alcance, incluso hasta podría pedir una homilía papal ... juojojojoo!

Ger.

PD: lo de su categorización respecto de mi sexez, visto está que ni idea tiene. Cuando aquí había sequía, yo andaba de inundación. Ahora llueve una semana, y por aquí ni una neblina, querida.

Gabriela Aguirre 4 de abril de 2013, 22:28  

Gerchu: Para recibir las actualizaciones de los comentarios, una vez que comentes, al lado hay una casilla que marcar que dice "seguir" o algo parecido, entonces te llegan al mail los nuevos comentarios en ese post.
No sé cómo te lo leerá el gallego, pero es así.
En cuanto al post data... Jajajajaja!
Besos.

Fla,  11 de abril de 2013, 22:53  

Gabi, me da tanta bronca lo que leí... no sé que te pasó, pero no te enojás nunca y que vos te enojes tanto es grave... hasta me ha dado un poco cargo de conciencia... no sé... me vino algo así como una conciencia sucia a la cabeza, aunque no te mentí pero por ahí siento que en parte no me banqué llevar a lo real la virtualidad que habíamos creado a la distancia...
de todas maneras justamente ayer me encontré hablando de vos, citándote, como quien dice y me preguntaron "quién es gabriela?" a lo que yo respondí> GABRIELA, MI AMIGA DE BS AS!!
No sé hasta que punto me conciderarás tu amiga, no hay miles de mates, hay algunos, muy ricos, como los primeros de argentina después de mucho tiempo... no hay cumpleaños, sólo te puedo decir que he mirado tu casa con google earth sólo para ilustrar mejor tus relatos y sí hay muchas horas y muchas palabras compartidas, más acá, más allá...
estoy loca, en el mundo virtual y mucho más en el real, con locura saludable y locura de manicomio, pero no te quiero lastimar ni lo he querido nunca. Te quiero por lo que te has dejado conocer, te quiero por lo que das, te quiero de la manera que puedo, pensando en vos dentro de mi corazón, dentro de mis afectos. Gabi. Te mostraste linda y loca y fumona y enamoradiza y valiente y tenaz y polémica... tantas cosas que yo vi, que yo sentí! no te quiero decir como sos... no te gusta, veo, no te conozco más de lo que te conoces. Solo te mando abrazos virtuales esperando un próximo encuentro real.

Fla,  13 de abril de 2013, 15:01  

hola Gabi! anteriormente te hice un comentario muy personal. creo que te lo debería haber mandado por mail. no creo q sea como para publicar, maxime después de haber renegado de haberte expuesto. mejor que quede para nosotras. te quiero. fla

Gabriela Aguirre 15 de abril de 2013, 16:58  

Flavita: A veces no se puede, simplemente eso, digo, llevar a lo real la virtualidad. Por los motivos que sean, probablemente todos válidos, sin embargo vos sos vos, Fla. Es decir, nos vimos veinte veces por cámara, ¡me llamaste desde Níger!, te fui a esperar a Ezeiza, nos vimos otra vez en Córdoba... vos sos vos, sos real. Y yo también te cito a veces (pero nadie pregunta porque todo el mundo sabe quién es Flavia).
La amistad... es una palabra grande, más grande todavía que esa otra que el mundo se cansa de pronunciar y que también empieza con A. Nosotras nos conocimos, compartimos mucho, hablamos mucho más aún, en Níger, aunque yo estuviera acá, estábamos juntas. De algo tuvo que servir tanto, no te parece¿
Me mostré como soy, Fla. Soy todo eso y bastante más. No es que no me gusta que me digan cómo soy, vos sabés cómo soy, vos has tenido todas mis llaves en algún momento, vos tenés permiso de decirme cómo creés que soy, de la misma manera en que yo, de vez en cuando, me paso horas retándote por cómo creo que sos.
Te mando abrazos virtuales, esperando los reales. Cuidate, nenita, te quiero.


Flavita: Quizás sí, pero no está mal tampoco. Ya lo publiqué y contesté. Las cosas que nos exponen no son esas, corazón de arroz, son otras. Más besos.

Grieguis 16 de abril de 2013, 7:12  

Aguirre, no sé como hace para escribir tanto, todo el tiempo, pero está claro que es parte fundamental de su vida.
Hace mucho que no la visito, ni le charlo y hoy después de todo lo leido me dieron unas ganas!
Asi que le mando un abrazo, hoy que me desperté 5:30 y estoy desinfectada como a ud. le gusta desde tempranito.
Creo que podriamos acercar naves, ya es tiempo.
Abrazo
Ale

Gabriela Aguirre 16 de abril de 2013, 9:53  

Griega: Jajaja! Escribo porque no sé vivir de otra forma, Griega, me extraña araña.
Usted sí que se despierta temprano. Le voy a mandar a mi gallo para que aprenda, que me canta a las tres de la mañana (me adelanta el gallo, podés creer¿).
Muy bien que esté desinfectada, entonces sí acercamos naves.
Páseme luego sus horarios por whatsapp, ok¿
Besos.

Fla,  16 de abril de 2013, 17:52  

sonrisas y más sonrisas en mi cara!!!

Maggie 26 de junio de 2013, 23:29  

Para bien o para mal (usualmente para bien), soy de las crédulas. Cuando viajé a Argentina en diciembre del año pasado, me quedé en casa de una amiga que solía tener un blog y a quien conocí por medio de este. Pero hasta mi llegada a Buenos Aires, solo así nos conocíamos. Nos habíamos enviado fotos y uno que otro mensaje de voz, pero nunca interactuamos de forma que pudiera comprobar que éramos quienes decíamos ser.

Compré mi pasaje con antelació (en abril del año pasado) y con fecha de regreso cuatro semanas después de llegar. A muy pocas personas les conté que no conocía a Julieta. Siempre bromeaba diciendo que, Julieta podía ser un gordo calvo (o un Juan Pablo) y que para ella yo podía serlo. Pero siempre he sido bastante loquita y aún así viajé a un país donde no conocía a nadie, para quedarme durante un mes en casa de una chica que no conocía más que virtualmente. Debo decir que me fue super bien y que Julieta es una chica lindísima y no un gordo calvo, pero durante un tiempo si tuve mis dudas y sentí algo de temor por el riesgo que tomaba.

Cuando le escribí para conocerla, estaba bastante nerviosa y ansiosa, pues no suelo ser de las personas que escribe para contactar a otras a quienes "conoce" solo virtualmente. Pero debido a que no sería una oportunidad de todos los días y a que usted realmente me parece genial, me arriesgué (tanto a una respuesta negativa, como a que fuese un gordo calvo) y le escribí. Y debo decir que fue una de mis mejores tardes en Capital (y déjeme decir que tuve tardes muy buenas). Supongo que soy afortunada por haber tenido la oportunidad de conocerla antes de que ocurrieran los eventos que inspiraron esta entrada y quiero agradecerle por haberme dado esa oportunidad. *carita muy muy feliz y sonriente*

Cambiando un poco el tema, creo que he encontrado en usted a una rival digna. Yo, que procuro ser discreta y limpiar mis rastros (aunque no con su blog, pues no necesito ocultar nada), creo que no podría contra su prevención: usted seguramente tendría algún artilugio que anule alguna de mis medidas para no ser rastreada. Ja! Ya hasta tengo curiosidad por saber cuál es el programita para usarlo también (excepto porque mi blog recibe solo visitas de una persona, así que no sería muy útil).

En fin, ya no tengo más que decir, más que gracias por, al menos hasta hace unos meses, confiar lo suficiente como para permitirme disfrutar de un café con usted.

Besos!

Gabriela Aguirre 27 de junio de 2013, 3:51  

Maggie: Jajaja!
En realidad, Maggie, sí tomé mis recaudos. En principio la cité en un lugar super público, y, después, envié mensajes a quien correspondía para decir "no me raptaron, estoy viva". Antes de eso ya usted me había llamado y yo me había asegurado que era una mujer y no un gordo calvo. Y, por supuesto, siempre rastreé sus entradas a su país de origen con lo cual su historia cerraba.
Si algo, aunque sea así de chiquito, no me hubiera cerrado, jamás de los jamases hubiera obtenido ni mi teléfono ni, mucho menos, mi presencia en ese café.
De todas maneras la pasé muy bien! Y me alegro que usted también.
Por supuesto no le guardé ningún chocolate a mi sobrino porque eran todos míos, jajajaja!
Pero me dio culpa y le compré uno en el kiosco antes de llegar a casa.
La próxima vez que venga avise y repetimos.
Besos!

Publicar un comentario

Bueno, llegaste hasta acá... ahora: ¡comentá!

El más comentado...

Vistas de página en total

  © Blogger template Simple n' Sweet by Ourblogtemplates.com 2009

Back to TOP