- ... por la cosa endogámica, Mo - le digo a Mónica en la cocina de su casa.
- Eso es inevitable, Teté. El mundo torteril es un pañuelo.
- No, inevitable un soto - replico.
- ¡Pero sí! Somos pocas y nos conocemos todas - insiste.
- No, eso es una vil excusa para levantarte a la ex de tu ex. No es verdad que somos pocas, no es verdad que nos conocemos todas y por supuesto no es verdad que sea inevitable.
- Es inevitable, Teté, las conocés en las casas de tus amigas, son amigas de tus amigas...
- Eso justamente es lo que digo: es endogámico. Y se termina en una fiesta brindando con tu pareja, tu ex, la ex de tu ex, la pareja de la ex de tu ex, la ex de la pareja de la ex de tu ex y ya me pierdo. No está bueno.
- Bueno, pero es así.
- No, así un soto. Yo estuve con mucha gente y no sólo no se conocen entre sí, sino que no tienen ambientes en común, no tienen gente en común (con una excepción), no hay manera de que se crucen alguna vez a no ser que se choquen en la calle y entonces es una pura casualidad que puede salir en una charla anecdótica. ¡Y yo no salgo nunca! Así que si yo pude conocer gente que no se juna entre sí, todas pueden. La endogamia sobre todo es paja de buscar en otros círculos. Y está todo bien, cada uno hace de su culo un florero y lo pone en la florería. A mí no me gusta.
- Pero es inevitable, Teté...
- ¡Y dale con lo inevitable! ¡No es inevitable! Lo que pasa es que se está muy acostumbrada a mirar cerca, digamos, a la mujer de tu prójima por decirlo de manera bíblica. A ver, un ejemplo concreto: mañana me gusta Gaby [su actual pareja].
- ¿Y yo no estoy más con ella?
- ¡Qué importa! ¡Es tu ex! Y no es cualquier ex, digo, no es una de tus loquitas, garches, cogidas, amigovias, como quieras llamarlas, estamos hablando de Gaby, convivencia, proyectos, años juntas.
- Bueno, sí, me va a molestar, pero yo no tengo derecho, si ya no está conmigo, a pedir que no estén juntas.
- Podrías pedirlo, sí, pero sobre todo la cosa va porque tu ex para mí es tan lisita como las barbies. Ok, me puede pasar igual, digo, uno no elige en el amor y me puede pasar igual, en ese caso... nada... elegiré.
- Con vos ni en pedo, Teté - acota Gaby desde el living.
- Lo mismo digo. Pero, se entiende lo que quiero decir?
- Sí, pero estás equivocada, vos no podés pedir que tal o cual persona sea intocable porque sino no queda nadie!
- Ni que me hubiera acostado con media argentina, Mo. Eso es un error, ves? En principio yo no pido ni prohibo nada, si me conocés un poco sabés qué pienso y cómo lo pienso. Y como decía antes, cada uno hace de su culo un florero y elige vivir como mejor le plazca, yo elijo vivir en la no endogamia, no sólo decirlo. Vos mañana te enamorás de mi ex y lo mínimo que espero es que me lo digas.
- Yo no te voy a pedir permiso.
- Pero la puta madre, no estás entendiendo!
- Además no sé si a ella le pasa lo mismo ¿y si no le pasa?
- ¿Y qué importa lo que le pase a ella? El punto acá es lo que a vos te pasa, si ella te corresponde o no es un detalle.
- Pero si no funciona esa relación...?
- Ay dios... pensar así es, como mínimo, especulativo. O sea que si no funciona no me entero? No importa eso, lo importante es lo que a vos te pasa. Tendrás que elegir, es así.
- Y sí.
- Y, por lo que veo, elegís por sobre mí.
- ...
- Yo no te presento a nadie más, querida, sos peligrosa, no tenés código - sentencié.
Para Germán: La imágen es de figuras de mujeres como tomando distancia
y el texto dice "mantendrás 6 grados de separación con tu novia".
Read more...