La mini Mónica
>> 14 may 2011
Caricatura de una nena durmiendo |
- Mirá, amor, que lindo para sacar una foto - le digo.
Pero no habíamos llevado la cámara y pensé que después podíamos volver cámara en mano.
Ahí nomás nos bajamos del micro y empezamos a caminar por el costado de la ruta. Yo llevaba una especie de carro de bebé pero sin ningún bebé en el asiento sino con una caja de cartón que venía a ser una casa de muñecas del subdesarrollo. Tenía una camita, una mesita, un placard pequeño y un montón de boludeces todas hechas de cartón, y mantelitos y cortinitas de retazos de tela. En la caja esta estaba mi amiga Mónica que tenía el tamaño de una barbie. Bueno, yo llevaba a la mini Mónica en el carro éste y la mini Mónica estaba subida a una mesita y agarrada a lo que vendría a ser la pared de su casa para ver hacia afuera, como encaramada a la medianera estaba la loca.
Pasamos cerca de una especie de laguna entre rocas y palmeras (ahora que lo pienso todo tenía un color amarronado, como si tuviera un filtro sepia) y del diome de la laguna empezaron a salir burbujas que se empezaron a acercar a la orilla. Yo quería quedarme a ver qué soto era, imaginaba que un cocodrilo o algo como el pez ese que se encuentran Nemo y Dory en el fondo del abismo que tenía como una luz colgando de la capocha, pero la mini Mónica gritaba que corriéramos de ahí así que nos alejamos corriendo ni bien las burbujas llegaron a la orilla.
Después empezamos a caminar por la cornisa de un edificio. Ya no éramos sólo Ella, la mini Mónica en el carro y yo, ahora también estaba Ricky, que es un amigo en común con Mónica. La cornisa era como un pasillo de un metro de ancho y estábamos como a tres pisos de alto. Veníamos caminando tranquilos, pero viendo que si nos caíamos nos matábamos seguro. Abajo la calle estaba desierta y llena de agua. Hicimos un par de giros y al doblar la esquina nos encontramos con el final de la calle y, por ende, de la cornisa.
Del otro lado de la calle había una plataforma, nos separaban algo así como dos metros, nos unía una mini cornisa por la que la mini Mónica podría haber caminado sola, pero estaba re asustada y no se animaba, y, aunque se hubiera animado ¿qué iba a ser una vez allá si con esas manitos no podía ni agarrar bien un cordón de zapatilla?
La plataforma tenía un toldo como el de los kioskos de barrio que era rojo con rayas blancas y de ahí bajaba una escalera a la calle.
Ricky pegó un salto hacia la plataforma y me pide que le pase a la mini Mónica. Mónica empieza a los gritos mientras yo le paso la caja a Ricky (con ella adentro, claro) estirándome todo lo que puedo para alcanzarlo. Ricky la agarra, pero medio se le resbala y entonces yo me asusto y le saco la caja donde la mini Mónica ya estaba llorando en un ataque de histeria y le digo que es un torpe y que se le va a caer, así que agarro a la mini Mónica y le paso la caja sola a Ricky que, a propósito, se le cae.
La mini Mónica se agarra con sus mini manitos a mi remera y empieza a gritar que está asustada y que ni en pedo se me ocurra saltar.
De la nada viene corriendo Emma por la cornisa con sus cachorros, son como seis, hay marrones y negros, pero no arenas. Las orejas le flamean a todos. Yo le grito que se quede quieta, pero es Emma y, obvio, no me da pelota. Salta hacia la plataforma como desaforada, pero no llega y cae junto con los perritos. Yo los veo caer, los veo quedarse inmóviles abajo y empiezo a llamarla y a llorar porque estoy segura que se murió. No sé qué hacer. Estamos todos mirando el cuerpo de Emma desde arriba. Llamo por teléfono al ex encargado de sistemas de la empresa donde trabajo y aparece junto a Emma. La abraza. Emma se intenta parar y tomar agua, los cachorros están asustados, él me la muestra y veo que tiene un gran tajo en la cara, tiene la cabeza abierta en dos.
Me siento a llorar en la cornisa porque sé que es mi culpa que Emma se haya lastimado así.
Me despierto.
Estoy loca, ya sé.
6 comentarios:
Lucy in the sky with diamonds...
si, eso mismo iba a decir... probaste sin porrearte pre-ir a la cama? Capaz así soñás más normalito...
Recién ganó lacademia, el Teo está en llamas...
Besos!
Manatee
Clau: Ah... ja ja ja... tonta.
Manatee: ¿Vos decís que será el porro?
La idea del porro será, porque hace mil que no fumo!
Volví a la cábala de no mirarlo y mirá: ganamos.
Besos!
estoy fascinada y envidiosa, no puedo creer que te la pases soñando!
Yo no te recuerdo un sueño ni con orden judicial! ufff
va en serio Aguirre, entonces. Y sí, AGUIRRE, así, toda mala onda, como para que se note la importancia de este tema: N O V E S M Á S U N P A R T I D O D E R A C I N G ! ! !
Se agradece su colaboración.
Manatee académica.
La Griega: Ah, sí, me la paso soñando tanto cuando estoy dormida como cuando estoy despierta, pero esos no los cuento porque me da verguenza.
Besos!
Manatee: Jajajajaja! Si no los veo! Pero vos me tenés que prometer que informás los resultados, tamos?
Este trato puede venirse a bajo si sucediera que yo no vi un partido y así y todo perdimos, tons quedaría demostrado que la yeta no soy yo y podría seguir viendo los partidos tranquila, no?
Besos Mana!
Publicar un comentario